Natureduca - Portal educativo de ciencia y cultura |
Conservación
PROTECCIÓN
Protección de los recursos naturales - 1ª parte
El origen de proteger las áreas salvajes
as ideas sobre protección de comunidades biológicas son de origen relativamente reciente. Aunque las comunidades naturales se han protegido desde tiempos antiguos, las razones obedecían a intereses particulares. Así, se protegió y resguardó la caza en la Antigua Mesopotamia, en China, y en Inglaterra, donde algunos bosques fueron acotados por Guillermo el conquistador. Se protegían estas áreas naturales para disponer de un lugar reservado a la caza real.
Los cultivos de huerto y jardines fueron mantenidos en los templos a lo largo de los siglos en China y Japón; los cedros de Líbano se mantenían alrededor de los lugares santos. Pero, como se ha dicho, tal preservación era implícita por la acción que perseguía un fin diferente, no se realizaba de forma intencionada. La idea de guardar áreas salvajes por su valor propio tuvo su origen en los Estados Unidos con Catlin, Thoreau, Muir, y otros de pensamiento similar.
Desde tiempos antiguos se protegían las áreas naturales para disponer de un lugar reservado a la caza real
Se adquirió el aprecio por la naturaleza salvaje durante el transcurso del conocimiento científico, particularmente el conocimiento ecológico. Realmente, sólo los que ganaban su sustento en estrecho contacto con la naturaleza, o los que lo obtenían directamente de él, apreciaban la trascendencia de sostener las fuentes de ese alimento.
Personajes como el "preservacionista" Jhon Muir contribuyeron a la idea de guardar las áreas salvajes por su propio valor
No obstante, el concepto de guardar la naturaleza salvaje por su propio valor, ha llegado a ser extensamente aceptado, aunque los medios para llevar a cabo esa labor no estaba disponible o desarrollado en cada país.
El valor de los ecosistemas estables
Las comunidades naturales poco afectadas por las actividades humanas, se consideran valiosos por una serie de razones. En primer lugar, el beneficio científico que se deriva de su estudio, particularmente acerca del funcionamiento de la biosfera.
Del estudio de los ecosistemas estables se puede aprender mucho, en lo que respecta a la modificación de esos sistemas para la producción de materiales útiles. También, el valor de las especies salvajes ha sido poco explorado; en su totalidad se reconocen como esenciales para el funcionamiento de la biosfera, pero la importancia de la especie individual aun es poco entendida.
La experiencia del pasado ha demostrado que las especies salvajes de valor poco claro, resultaron de importancia mayor en la investigación médica y la salud humana. Algunas especies animales y vegetales salvajes, han sido clave en determinados estudios embriológicos, o como fuentes de drogas y medicinas.
Gran parte del conocimiento sobre el crecimiento de la población y las variables sociales bajo condiciones de agrupamiento, han venido del estudio de mamíferos salvajes. Además, se sabe que comunidades naturales más o menos estables, son importantes en el funcionamiento continuado de las poblaciones que han creado.
Así, las comunidades arbóreas protegen los acuíferos y corrientes de superficie, y evitan la desaparición de ese recurso por efecto de los agentes físicos externos, que actúan precisamente en ausencia de esas barreras vegetales. igualmente, los estuarios protegen la vida marina, garantizando la producción continuada con fines alimentarios u otros variados propósitos.